En la Cámara de los Diputados, ha tenido lugar una sesión plenaria especial monográfica, para reflexionar sobre el tema de las violaciones a menores, que se registra actualmente en nuestra sociedad y después de varias deliberaciones el Pleno de la institución ha adoptado una declaración institucional, condenando esos hechos.

La violencia sexual es un problema que menoscaba los derechos humanos y un problema de salud que tiene un gran impacto en el individuo, la familia y la sociedad, porque deja secuelas emocionales y psicológicas para quienes la sufren.

La Cámara de los Diputados, como institución que representa al pueblo de la República de Guinea Ecuatorial, no podía quedar indiferente ante el clamor de ese pueblo, por las violaciones a menores, unas malas prácticas que proyectan una mala imagen a nuestro país, tal como lo ha indicado su Presidente Doctor Salomón Nguema Owono. 

Las reflexiones de los representantes del pueblo han comenzado con la presentación de una ponencia sobre ese tema, en el hemiciclo parlamentario, en el que el Honorable ponente Eugenio Nze Obiang, quien ha indicado que la violencia sexual a un menor puede suceder en el seno de una familia, de una institución, como la escuela o un centro de protección infantil.

También puede ocurrir con una persona extraña o desconocida y la mayoría de las personas que abusan sexualmente a las niñas y niños son hombres, pero también hay mujeres que cometen ese delito y proteger a los menores del abuso sexual es una responsabilidad que corresponde, en primer lugar a las madres y padres, de ahí la importancia de que las familias estén informadas suficientemente sobre esa cuestión, con el fin de que protejan a sus hijos e hijas de esos abusos, hablando con ellos sobre el tema de la sexualidad, para que aprendan a identificar las señales de abuso sexual y conozcan la forma en que deben relacionarse con otras personas, aunque sean de confianza.

La ponencia también ha abarcado los efectos de la violencia sexual a un menor, que deja en la víctima secuelas psicológicas severas, sentimientos de vergüenza y de injusticia, el sentido de culpabilidad cuando el violador es un familiar, en algunos casos la víctima puede contagiarse de enfermedades de transmisión sexual, desarrollar un comportamiento sexual anormal y, en los casos más drásticos la víctima puede llegar a asesinar a su abusador o abusadores.

Para proteger a nuestros niños y niñas de la violencia sexual, el ponente ha abogado por la creación de un clima de confianza en el seno de las familias, para que los padres y madres dediquen tiempo para comunicarse con sus hijos, con el fin de que el menor pueda hablar de lo que le ocurre, le preocupa o le extraña, una labor que los padres deben desempeñar conjuntamente con los profesores y maestros.

El Honorable Eugenio Nze Obiang ha concluido su disertación con varias recomendaciones, en el sentido de que las leyes vigentes en esa materia sean aplicadas por los jueces, que las políticas públicas apunten a la prevención de esas conductas delictivas, que el Ministerio Fiscal actúe de oficio ante esos casos, que los juicios por violación a menores sean públicos, que el Gobierno implemente un plan de sensibilización a los padres y tutores, que el Estado cree centros especializados para los menores víctimas de abuso sexual y que los presos por violación sexual dispongan de terapias especializadas, además de la responsabilidad penal que deben asumir.

El Diputado co-ponente del tema José Emilio Ndong Masie, ha hablado sobre el régimen jurídico aplicable sobre esos delitos en nuestro país, desde la Ley Fundamental, el vigente Código Penal, el Decreto presidencial sobre la protección de menores en Guinea Ecuatorial, hasta la Convención sobre los derechos de los niños, niñas y adolescentes, informando además sobre las penas previstas y el correspondiente régimen sancionador.

El Diputado José Pablo Nvo Oworo Aviri, otro co-ponente del tema, también ha intervenido para resaltar la importancia de que en nuestro país se disponga de un modelo propio que sea más efectivo, en el proceso de castigar a los abusadores o violadores a menores y la importancia de una educación preventiva, para erradicar esos malos comportamientos en nuestra sociedad.   

En sus reflexiones sobre esa problema social, los demás honorables también han lamentado el hecho de esa lacra se esté proliferando en nuestro país, por eso abogan en el sentido de que los padres y las madres se esfuercen en el cuidado de sus hijos menores ,que el Gobierno vele por la efectiva aplicación de las normas vigentes en esa materia, para que los autores respondan por sus actos criminales y que se intensifique los mecanismos de sensibilización en todas las esferas de la sociedad, acorde a nuestras costumbres ancestrales. 

Después de esas deliberaciones, se ha reunido el Pleno de la Cámara de los Diputados y después de escuchar las valoraciones de los Portavoces de los grupos parlamentarios, se ha adoptado una declaración institucional de condena y repulsa a esas prácticas que atentan contra los derechos del menor y proyectan una imagen negativa sobre nuestra sociedad, pidiendo a la población a utilizar todos los medios a su alcance para denunciar esas prácticas e instando a las autoridades e instituciones involucradas en el mantenimiento del orden y a los administradores de la justicia a aplicar, con el máximo rigor, el Código Penal y los demás Decretos y leyes vigentes en el país.

Texto y fotos: Gabinete de Prensa de la Cámara de los Diputados

Envío: Clemente Ela Ondo Onguene (DGPEPWIG)

Oficina de Información y Prensa de Guinea Ecuatorial

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